Son muchas las veces que fracasamos en nuestros intentos de comenzar una dieta. En algunos casos depende de otros factores, como la falta de planificación, y motivos como los que veremos a continuación.
Comenzar la dieta cuando estás baja de ánimo:
Cuando comienzas una dieta con un estado de ánimo bajo, lo más seguro que todos los problemas que no puedes sacarte de la cabeza te pasen factura, y que por lo tanto, no logres llevarla a buen término. Antes de fracasar, es preferible esperar el momento oportuno para hacer dieta.
Eliminar la cena de un golpe: